Caracas.- Acostumbrado a ser un pelotero decisivo para Cardenales de Lara, Juniel Qerecuto cerró la eliminatoria con números modestos con el madero, incluso atravesó por un slump defensivo. Pero una vez que el calendario hizo la transición hacia el Round Robin, después de Navidad, el campocorto elevó su rendimiento de manera superlativa.
“Estoy muy contento con los resultados que se han estado dando, no solo por mí sino por el equipo. Estoy aportando mi granito de arena. Es lo que Lara estaba esperando de mí. Estoy demostrando que puedo aportar”, le dijo Querecuto al periodista Hugo Guerrero, de SimpleTv.
En 42 desafíos en la primera fase del campeonato, el toletero ambidiestro exhibió una línea ofensiva de .231/.306/.308, con 16 remolcadas y .614 de OPS, en 156 veces al bate. Su promedio se situó 90 puntos por debajo su average vitalicio (.321), entre las campañas de 2014-2015 y 2018-2019.
Liego de jornada del sábado, las 10 impulsadas del barquisimetano lideraban a los pájaros rojos y apenas eran superadas en la semifinal todos contra todos por el jardinero de los Tigres de Aragua, Denis Phipps, con 11. Además, sus promedios se robustecieron hasta elevarse a .385/.415/.436, con .851 de OPS.
“Para nadie es un secreto lo que ocurrió en ronda regular. No era el mismo Querecuto que estaban acostumbrados a ver en años anteriores, pero, gracias a Dios, di ese paso hacia el Round Robin porque sabía la responsabilidad que tenía en frente”, enfatizó el ex All-Star del sistema de granjas de los Rays de Tampa Bay, al canal TLT.
Entretanto, el fino fildeador dejó atrás los problemas que le aquejaron con el guante durante el mes de noviembre.
Querecuto no ha cometido errores en 12 encuentros seguidos, desde el final de la rueda regular y apenas ha incurrido en una marfilada en sus más recientes 18 desafíos. El mánager Carlos Mendoza siempre lo respaldó y lo mantuvo en la alineación, pese a las críticas de los aficionados al club, en especial a través de las redes sociales, por su bajo rendimiento.
“El enfoque y la confianza que tengo ahora, fue lo que me faltó antes. Estaba un poco distraído, fuera de onda, pero ahora es cuando valen los resultados”, afirmó el experimentado infielder, de 29 años de edad.
En la Serie Final de la temporada 2018-2019, contra Leones del Caracas, el torpedero se encargó que todos los reflectores le iluminaran y se alzó con el Premio al Jugador Más Valioso de manera unánime. Esa había sido su última campaña en el país, antes de regresar en la 2021-2022. Ahora retoma las cosas justo donde las dejó aquel mes de enero de hace tres zafras.
Juniel Querecuto no ha cometido errores en sus último 12 encuentros, incluido el final de la eliminatoria
